Nuestro siguiente destino es la isla de Brač. Se prevé un baño en la playa más famosa de Dalmacia, Zlatni rat, situada cerca de Bol (‘Cuerno de Oro’: su promontorio de grava se mueve de un lado al otro por la acción del viento y de las olas, que lo cambian constantemente de forma). Bol es un típico pueblo de pescadores dálmata transformado en atractivo destino turístico. Después de la comida zarparemos de vuelta hacia Split, donde pasaremos nuestra última noche. Haremos una pausa para nadar en una de las numerosas bahías de la isla de Brač. Después de disfrutar de las vistas de la Riviera de Split, podrá unirse a una visita guiada de Split, una de las ciudades-monumento que se encuentran bajo la protección de la UNESCO, y que no pertenece sólo a los croatas, sino también a Ustedes, como parte del patrimonio mundial. Hay muchísima arquitectura romana en Split, y lo que despierta especial interés es el Palacio de Diocleciano.